LA NOCHE
Recordaba Sasha con una copa
de vino tinto en sus manos todos los momentos que vivió junto a Eduardo. Pues, ni todos los centenares de hombres que pasaron por su cama consiguieron
desaparecer esa marca indeleble que habría dejado el joven con cada caricia,
con cada beso y con cada mirada que a ella le dejaba estupefacta.
De repente su celular sonó, ella dudosa en contestar observó
la pantalla, era el muchacho que no dejaba de buscarla, cansada de todo lo que
había vivido Sasha con la esperanza de encontrar consuelo devolvió la llamada…
-
Hola
Eduardo silencioso aguardó para que ella continuara con la
conversación
-
Necesitaba escuchar tu voz, perdona por no haber
contestado, dijo ella.
-
Siempre lo has hecho Sasha.
-
¿Por qué dices eso?
-
A veces, el amor no es suficiente para que dos
personas unan sus vidas, no existen los finales felices..
Tras varios segundos Eduardo continuo diciendo...
Solo te haré una pregunta Sasha .... ¿Si me necesitas por que sigues trabajando en lo mismo ?, sabes esperaba que tu amor por mi fuera mas fuerte que tu ambición.
Sasha sintió escalos fríos ante esas palabras, desorbitada,
temblando y con las manos sudorosas lo único que pudo decir a su favor fue:
-
Realmente lo siento.
-
Creo que realmente nunca te importó. Lo siento pero ya no puedo más.
Después de esas duras palabras emitidas por Eduardo, solo quedó
apretar ese botón rojo que no solo acabaría con la llamada, sino también con el
amor ferviente del uno por el otro.
Sasha salió de su casa y si dirigió a su lugar de trabajo, saludó con todas sus
compañeras de noche y siguió esperando. Una mirada penetrante llamó su
atención, era un hombre muy apuesto, alto y joven que la había estado esperando
durante un largo rato.
Sasha recogió su cabello, mientras aquel hombre apuesto le
invita unos tragos, después de un rato entre risas y piropos ardientes se
dirigen a la habitación 212, en dónde enloquecida entrega su cuerpo a un hombre
que apenas conocía, en cada caricia imaginaba que aquel hombre era Eduardo,
pero cada vez que abría los ojos se daba cuenta que tan solo era uno de los
tantos hombres con los que pasaría esa noche. Cuando terminó la noche, solo quedaba contar los hombres con los que había estado.
Varios días después sin poder olvidar, Sasha decide salir a despejar la mente sin saber que su verdadera historia de amor recién estaría por comenzar.
¿Eduardo en dondes estas? era la pregunta que estaba presente el la mente de aquella hermosa mujer.
Mientras tanto Eduardo aprisionado por un grupo de sicarios a los que le debía dinero, buscaba desesperadó una salida. Tras un ventanal observa a su amigo Fernando mas conocido como Cachorro con un maletín sin saber que es lo que sucedía, solo le queda esperar.
Horas y horas pasaron y solo podó escuchar pequeños susurros.. El capitán de la banda con voz de estruendo dijo:
Saquenlo de aquí.. no quiero verlo más.
Un hombre corpulento se acerca a la puerta y a empujones lo saca de ahí pidiéndole que se fuera y que no volviera más.
Al salir de tal espantoso lugar Eduardo mira a si amigo Fernando y sin pensarlo dos veces se acerca.
-
¿Cachorro que haces aquí..?
-
Como siempre a salvarte la vida
-
Gracias hermano
-
No agradezcas.. -Con un rostro de cadáver continuo diciendo:
Vete... el dinero que le dí no es real y tienes que ocultarte antes que se de cuenta
Sin saber que hacer Eduardo solo camina al centro de la cuidad pensando en todo lo que le había pasado y sin esperarlo solo puede ver a su amada caminar. La toma de la mano y lo único que puede hacer es abrazarla como si fuera lo último que pudiera hacer. En ese mismo instante una vos conocida hace que él voltee a ver , reconoce a los hombres de Costra los que lo miraban dando pasos agigantados con intenciones de atraparlo.
Solamente queda correr ... como siempre lo a hecho.